A principios del 2011, Nestlé Suiza se vio en una disputa bastante particular con la entidad pro-animal. Las cosas pasaron más o menos así: Greenpeace denunció a la gran firma alimentaria por usar en sus Kit Kat aceite de palma proveniente de las selvas indonesas, “amenazando el sustento de la población local y la superviviencia de los orangutanes”. Sinar Mas, la empresa proveedora de aceite de Nestlé, era entonces apuntada como la principal culpable.
La primera reacción de Nestlé fue negar su relación con Siner Mas. ¿Cuál fue la respuesta de Greenpeace? Hacer un buen uso de la viralidad de las redes sociales, pidiendo a los usuarios “no que dejaran de consumir kitkat, sino que apoyaran la campaña para que Nestlé dejara de utilizar este tipo de aceite”. La respuesta plural no se hizo esperar y la red se llenó de solicitudes de apoyo y criticas a la marca suiza.
¿Qué hizo entonces Nestlé? Caer en diversos (y gravísimos) errores, como son:
- Amenazar a sus usuarios: En lugar de dar respuesta y gestionar la crisis, dando respuesta a las criticas, cuando éstas llegaron a su página de de Facebook, (que cuenta con nada menos que 90.000 fans), la compañía “amenazó con borrar todo comentario de usuarios en los que apareciera el falso logo creado por greenpeace)
- No contentos con esta amenaza, Nestlé directamente borró aquellos comentarios negativos sobre su producto y Desactivó (supuestamente, ya que todavía nadie asegura que haya sido directamente la compañía) la página de fans de kit kat que hervía de comentarios de indignación de los fans.Tres gravísismos errores que ha tenido que enmendar empezando por perdir disculpas a los indignados fans.
¿Qué hubiese hecho yo?
Algo muy distinto: Primero que todo, no caer en confusiones ni contradicciones, ya que la marca primero negó cualquier vinculo con el proveedor de miel de palma y luego, mediante un comunicado, hizo saber que había roto sus lazos con Sinar más.
Jamás hubiese vetado los comentarios de los seguidores de la página de Facebook, menos aún caer en amenazas. Si nada hago, nada temo, por lo menos eso es lo que debo transmitir. Creo que Nestlé no tomó en cuenta el alcance y rapidéz que pueden llegar a tener las redes sociales. Debieron dar respuesta a las dudas y comentarios que tenían los usuarios.